El cambio climático, la inequidad de género, la economía, los alimentos o la energía son algunas de las cuestiones que deben afrontarse si queremos avances sostenibles en el objetivo de conseguir la mejor salud posible para todas las personas.

En este escenario mundial, la red de medicusmundi Internacional (MMI) ha continuado siendo un actor relevante en 2018 en las dos áreas de trabajo definidas en su plan estratégico: la gobernanza global de la salud y la cooperación sanitaria internacional, procurando que los dos sectores sean permeables el uno con el otro. La incidencia en la gobernanza global en salud de MMI tiene una influencia de las experiencias de terreno de la cooperación sanitaria, ya que permiten conocer si esas políticas son adecuadas o no para los intereses reales de las personas más vulnerables. Y el trabajo en el terreno debe conocer como le afectan en su día a día las grandes políticas globales.

Sus 20 miembros vienen de diferentes entornos: algunos miembros de MMI son ONGs de cooperación internacional, otros de incidencia política, otros son federaciones de ONG, incluso hay miembros que provienen del mundo de la academia. Los espacios que proporciona MMI para el análisis y el debate, unido a la variedad de sus miembros permite que pueda contribuir activamente en las diferentes discusiones del sector salud en diferentes ámbitos internacionales, con preguntas y análisis que en determinadas ocasiones van en contra de la corriente general de aceptar per sé las políticas y estrategias, sin reflexionar sobre las consecuencias reales de las mismas sobre el derecho a la salud de las personas.

MMI ha tenido en 2018 una participación activa en muy diversos escenarios. En la Organización Mundial de la Salud (OMS), MMI ha presentado diversas declaraciones en la Asamblea Mundial de la Salud en Ginebra y ha participado en las reuniones del Comité Ejecutivo de la OMS. También ha seguido el proceso de reforma de la OMS, y junto con otros actores, está procurando revertir la reducción de espacios que se pretende establecer a la sociedad civil, para dar cabida a nuevos agentes como pueden ser las empresas privadas. También estuvo presente en otras cumbres globales como la Conferencia Mundial sobre Atención Primaria de la Salud en Astana (Kazajistán), donde la participación de MMI se focalizó principalmente en dos asuntos: conseguir que las políticas de salud estén centradas en las necesidades de las personas, y en no olvidar que un nuevo orden económico mundial es necesario para conseguir la salud para todos y todas. En el Geneva Health Forum MMOI propuso un debate sobre las ventajas y desventajas de la salud digital en los países más vulnerables, y en la 4ª Asamblea de People’s Health Movement en Dhaka (Bangladesh) volvió a presentar una reflexión sobre el papel de la cooperación internacional sanitaria en tanto en cuanto puede debilitar o fortalecer los sistemas locales de salud.

También en 2018 se ha seguido participando en algunos encuentros propiciados por los miembros de MMI, y debemos mencionar que este año ha habido una especial relación con los miembros de Federación de Asociaciones Medicus mundi España. MMI ha estado presente en el simposio internacional sobre sistemas de salud en Bilbao realizado por medicusmundi Bizkaia, y en la Conferencia sobre Determinantes de salud auspiciada por medicusmundi Mediterránea en Mozambique. Igualmente, MMI ha estado presente en 2018 en la Conferencia Salud para todos en 2030 organizado en este caso por otro miembro, medicusmundi Suiza,

Debemos igualmente destacar el compromiso de MMI con potenciar las alianzas de la sociedad civil, destacando el papel que MMI tiene en la plataforma UHC2030 (Cobertura sanitaria Universal 2030) y su Mecanismo de Compromiso de la sociedad civil (CSEM, en sus siglas en inglés), y con la plataforma para hacer incidencia en Ginebra G2H2, de la que MMI sigue llevando su Secretaría Técnica.

A nivel interno, MMI dio la bienvenida a un nuevo socio más (Medics Withouth Vacation) y con el acuerdo firmado con Open Society Foundation pretende en 2019 poder aumentar la participación de la sociedad civil africana en los debates globales en salud, debates en los que las organizaciones africanas   no suelen tener espacios y oportunidades de presentar sus propuestas, a pesar de ser uno de los actores más relevantes en este sector.

Es tarea de MMI continuar buscando espacios donde la gobernanza de la salud global y el trabajo en los países más desfavorecidos puedan alimentarse mutuamente, para ayudar a que el derecho a la salud sea una realidad. Y desde MMI lo hacemos incidiendo en las políticas globales y trabajando en los problemas locales.